Sinfonía Fragmentada

Como un ejercicio de tensión entre lo geométrico y lo residual, el título alude a una música rota, una partitura incompleta en la que cada fragmento se comporta como una nota visual. Lo que en apariencia es residuo se reordena aquí como ritmo y composición, generando una arquitectura efímera que vibra entre el orden y el colapso.
La fragmentación no es solo formal, sino también conceptual: habla del consumo que dispersa, del rastro plástico que invade ríos y territorios, y de la imposibilidad de volver al estado inicial. Sin embargo, en esa ruptura aparece también la posibilidad de otra belleza: la música secreta de lo descartado, la poética que emerge de lo inservible cuando se lo configura en clave estética.